tag:blogger.com,1999:blog-60277051913357656702024-03-06T04:14:07.209+01:00SonidoSopladoSCareliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.comBlogger96125tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-77677532869449311282011-12-18T00:12:00.003+01:002011-12-18T00:45:47.521+01:00DiVersos<br>La belleza, goce y melancolía<br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-90633212680178845692011-12-18T00:09:00.002+01:002011-12-18T00:12:03.598+01:00DiVersos<br>Sabrás tarde, maldición y promesa<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-81664839320699911542011-05-14T13:21:00.003+02:002011-05-14T13:39:37.015+02:00DiVersos<br><br /><br>Si acaso la cosa o el fracaso.<br><br /><br />-------------------------------------<br /><br>Besos calmos.<br /> Caricias agrias.<br><br /><br />------------------------------------<br /><br>Los ojos del presente:la juventud del tiempo.<br><br /><br />-----------------------------------<br /><br>La vida es definitiva.<br><br /><br />-----------------------------------<br /><br>A quien viene de la catátrofe, <br /> le espera el derrumbe.<br><br /><br />----------------------------------<br /><br>El azar procede con las formas del destino.<br><br /><br />---------------------------------<br /><br>Se mueve la hierba, culebrea la tierra.<br><br /><br />---------------------------------<br /><br>Una mota roja y un olor de sangre<br /> en el campo blanco de sudor desperdiciado.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-80453269810752280762011-05-13T18:49:00.008+02:002011-05-14T18:31:10.069+02:00Narraciones ficticias 25<br>LOVE IN BLUE<br><br /><br /><br>Has cogido un sombrero de paja y lo has colocado en tu cabeza. Se te ha escapado una sonrisa que traía los años de juego con la pequeña. El peine, la toalla, el parloteo de la niña y los ruidos de la cocina donde se preparaba la cena. Sentado en el sillón verde, donde la pequeña alcanzaba a tu cabeza y a tu cara feliz de estar viviendo la densidad de un instante.<br /><br>Te has colocado el sombrero de paja y tu sonrisa se ha ido a las hazas en flor, cuando el agua corría por los surcos en aquellas primeras horas de la mañana y la tierra desprendía un olor germinal. Con el sombrero te has colocado los cantos que cubrían las tardes de las cosechas, donde las damas y caballeros se lanzaban amores y desencuentros y narraban en coplas la deseada vida y su deslomada existencia.<br /><br>Tu sombrero de paja abrió los tiempos de <em>ella</em>, llenos de heno y amapolas, el olor de sus faldas y el restallar de sus sábanas. A la sombra tu recuerdo, de un sol que todo lo abrasa. Tenías con tu sombrero, la sonrisa de su presencia, allí en aquella casa donde tu mano alcanzó aquél de propaganda, que tenía el misterio del instante que nos brindabas.<br /><br>En la casa sin tiempo, tu brazo cogió su cintura mientras la llevabas a mulo por el río, por la cañada, por los chopos de juventud que vieron vuestros labios juntos, vuestra piel amándose, vuestra vida henchirse. Trajo tu sonrisa a tu muchacha deseada.<br /><br>Tu sombrero de paja ha llenado de tiempo la estancia.<br />Has alzado tu brazo, has cogido el sombrero, se ha cerrado tu sonrisa en una tristeza amarga. Se han cargado los ojos de ausencia, de vida deshabitada, de presente descontado. De comunión y silencio. <br /><br>La pequeña, sentada a tu lado, ha cogido tu mirada y el sombrero, con sonrisa adolescente. Ha viajado en sus recuerdos al instante de tus pajas. Ha recogido el peine, la toalla y el agua que vertió con sus infantiles manos en tu camisa y tu chaqueta de algodón, aquél que las coplas tanta veces escucharon. Ha entendido tu tristeza en el tiempo ido de su infancia, cuando jugaba a peinarte tus cabellos de plata.<br /><br>El sombrero y la sonrisa han quedado en la mesa, quizá esperando otro instante, ligero y leve como la paja.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-83743278445049932522011-04-27T19:16:00.001+02:002011-04-27T19:17:48.810+02:00DiVersosCoro de mayo
<br />
<br />
<br />Que me den las campanas
<br />Y que me den las rosas.
<br />
<br />Que me den los chiquillos que a media tarde
<br />cantaban canciones de mayo.
<br />
<br />Que me den las canciones a las rosas, las canciones a las flores,
<br />al blanco manto de la muchacha delicada.
<br />Que me den un encargo deleitoso,
<br />como el de la muchacha blanca.
<br />Hacer de los pétalos, milagro.
<br />
<br />Que me den el embriagante aroma
<br />de las rosas y el tierno atardecer de mayo
<br />que amplios ventanales, dejaban caer en el cuadro.
<br />
<br />Que me den el embriagante aroma de rosas,
<br />dulce éxtasis de la tarde,
<br />que dan al coro desafinado una estampa
<br />y un recuerdo nostálgico.
<br />
<br />De las campanas y las rosas
<br />que me den, los blancos.
<br />
<br />
<br />
<br />Etiquetas: DiVersos Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-64362738324210911532011-03-26T00:36:00.010+01:002011-04-06T20:40:02.730+02:00Umbral<br>Sentado en el umbral del tiempo.<br /> <br />-No empieces de nuevo con tus poesías. <br /><br />En el umbral al menos, cuando esperaba que el sol entrara por el río. <br /><br />-Si vas a seguir por ahí, me voy a marchar, no quiero escuchar. <br /><br />En el umbral del río, una tarde cuando el sol ya entraba, sentía la arena caliente bajo mis pies.<br /> <br />-Sí, era una tarde que caía cálida y nueva. Habíamos ido a los huertos entre los chopos y el aire olía a hierbabuena. <br /><br />Tú no quieres mis poesías, prefieres las tuyas ¿verdad? No, a lo mejor no vale la poesía para aquella tarde de tiempo rabioso. <br /><br />-El olor a hierbabuena hacía pesada la tarde. <br /><br />No veles, la tarde era pesada por el umbral del río. <br /><br />-Te he dicho que si vas por ahí, me voy. La tarde caía con la dulce luz de los lirios. La arena picaba en los pies y yo quería irme. <br /><br />Tú no querías irte. <br /><br />-Sí, te dije que nos fueramos, tú insististe, en el umbral del río. Estuvimos en el otro lado y no hubo ningún problema. El sol aún estaba lejos del rojo umbral del horizonte. <br /><br />Tú insististe, cuando volvimos de estar con ellos, tú insististe en el umbral del río, porque en la otra orilla estaba ella.<br /> <br />-Qué, no saques ahora cosas, qué, tú no viste nada. En la orilla estaba el sol entrando en el juncal. <br /><br />En la orilla estaba ella, vistiendo braguitas.<br /> <br />-Qué dices, qué dices ¿ves como el río con su umbral de sol, se te ha subido a la cabeza?. <br /><br />Los que estaban con ella, se divertían mirándola, mirandola mientras daba vueltas entre el juncal. <br /><br />-Te equivocas, la arena la tienes en la cabeza, no en los pies, te equivocas, los otros fueron tras ella y el olor entre los chopos les aligeró las ropas.<br /> <br />La tarde ha traspasado el umbral. Tú lo viste, todos corrían, corrían rozados por los helechos y el olor a menta y a humedal les llevó hasta el umbral del río.<br /> <br />-No ví, no miré, no quise ver, lo ví antes, inmediatamente, luego ya no quise ver, cerré los ojos y no quise ver. <br /><br />Pero oíste el chapoteo en el agua, oíste, no puediste no oírlo.<br /> <br />-Deja que me agarre al umbral, deja que no oíga en esta tarde nueva de sol en la arena.<br /> <br />Reían, reían. El río cálido deslizaba, por entre umbrales de sol, sus cuerpos canela En el umbral del tiempo, ella gritaba. En el umbral del río, se hizo el silencio.<br /><br />-Cállate. Ya te dicho que en el río ni hay juncal ni hay arena caliente en los pies de la tarde nueva. No hay río en el umbral de la vida. Hay silencio en el umbral del tiempo.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-23634740716756098492011-03-25T23:49:00.003+01:002011-03-26T00:35:25.130+01:00DiVersos<br>Diálogos del silencio,<br /> metáforas del olvido.<br /><br />--------------------------------------------<br /><br>Cielo y tierra se deshilvanan, en el horizonte.<br><br /><br />---------------------------------------------<br /><br>Una botella en el aire. <br /> Confianza y destino.<br /><br />---------------------------------------------<br /><br>Destino, no quita brizna a la incógnita de acogida.<br><br /><br />---------------------------------------------<br /><br>Un nombre, letras para un muerto.<br /><br />--------------------------------------------<br /><br>Los desaparecidos vienen a los sueños,<br /> para dejarse ver.<br /><br />-------------------------------------------<br /><br>Quiere el invierno volvernos<br /> niños con el frío, con la nieve y el viento.<br /> Quiere el invierno que la chimenea nos pierda<br /> en la nostalgia.<br /><br />------------------------------------------<br /><br>La voz de un padre: deseando que vengan, y temblando que lleguen.<br /><br />-----------------------------------------<br /><br>El sueño de una noche, <br /> o el despertar en invierno.<br /><br />-----------------------------------------<br /><br>En el invierno de un padre,<br /> el sueño de una voz.<br><br /><br />-----------------------------------------<br /><br>Éter: metáfora de los diálogos del silencio.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-3137641146047249682011-02-26T22:32:00.003+01:002011-02-26T22:37:06.566+01:00Narraciones ficticias 24<br>Qué tal tío.<br />De currar. Bien.Bueno, regular.He estado de baja...la espalda.<br />Silencio, desvío de miradas...<br />Pero bien.<br />Silencio. Los demás hablan un poco entre sí. Algún gesto dolorido.<br />Sobretodo soledad, mucha soledad.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-14544479844283675992011-02-26T22:01:00.008+01:002011-03-03T09:40:07.164+01:00DiVersos<br>Y ahora los muertos están volando, dice el niño<br />mientras lanza besos al viento.<br><br /><br />----------------------------------------<br /><br>Un duro albedrío.<br><br /><br />----------------------------------------<br /><br>La memoria obliga,<br />a seguir viviendo.<br><br /><br />----------------------------------------<br /><br>La sobriedad asombrada<br />de la virgen románica(XII)y<br />la sensual boca y la pícara mirada<br />de la virgen cristiana(XVI).<br><br /><br />----------------------------------------<br /><br>Se han roto los cántaros y se ha pervertido la vida.<br><br /><br />-----------------------------------------<br /><br>La planicie del mar acalla<br />un momento,<br />las espigas cerebrales.<br><br /><br />----------------------------------------<br /><br>historia de amor,<br />gemelos en silencio.<br><br /><br />----------------------------------------<br /><br>En la esquina<br />deshojada la rosa de los vientos<br />hallé<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-77924820485287684462011-02-26T21:38:00.004+01:002011-03-05T12:47:34.055+01:00Narraciones ficticias 23<br> UNA DE VERANO<br><br /><br>En una ciudad italiana de sensual nombre, una noche, perdida la orientación, erraba por un parque desconocido.<br />En la acera próxima, sentados en una terraza, un par de hombres jóvenes, ansiosos de ligoteo turístico, sonríen y chistan con incitación de verano.<br />Saliendo del parque, pasea su mirada por el lomo brillante de una ducati azul.<br />Los jóvenes, aludidos, le silvan jaleados.<br />Se acerca y próxima les encara un ¡ah, ah! divertido.<br />La cabeza ya gira en la dirección emprendida y ve la estela de una mirada de asombro.<br />La de aquél que al pasar, notó los años.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-3255845685143078612011-01-22T22:04:00.011+01:002011-01-23T17:43:01.789+01:00Narraciones ficticias 22<br>UNA SIESTA<br><br /><br /><br>Traje azul oscuro, camisa azul celeste y corbata azul casi gris con motitas ligeramente granates. Pudiera ser que estas motitas fueran rombocitos o pequeñas mediaslunas, que las corbatas llevan para despistar el color general, o vizquear.<br /> <br /> Falda negra, recogida abombachadamente, ligeramente por encima de la rodilla. Ella, elegante y económica, destacaba en el arreglo la gabardina verde oliva de botonadura cruzada. <br /> <br /> Él con media barba de dos días, si bien tampoco parece sacrilegio considerar tres días, lee un libro ávaro y distraido. Un libro que tal vez Quijano, leería hoy. Un best-seller del día. <br /> <br /> El de traje azul oscuro y media barba leía este libro, luego otro libro,otro libro y todo indicaba que devoraba los libros de aire, corrientes de viento, vampiros y fantasmas; asesinatos, monjes, monasterios, chica destroyer conoce chico macarra, en fin, multitud de lecturas que le entretenían la cabeza y los días. <br /> <br /> Hoy, mientras lee uno de sus libros, lanza miradas de las llamadas de soslayo, a una moderna Dulcinea, que de tez dilicadamente suave y labios ligeramente sonrosados, reposa en el banco cómodamente, parece que descabezando un sueño inoportuno, impedíendola apreciar los ojazos de él, clavándose en su mentón que tenuamente se mueve.<br /> <br /> De soslayo mira sus finas pantorrillas, pretegidas del leve frío por unas medias que a él se le antojan, desde luego, de seda negra -A su Dulcinea gloriosa, no le va a conceder unas medias de almacén.<br /> <br /> De soslayo mira, mientras sueña y ve que las finas piernas culminan sobre un pequeño tacón. Un taconcito de factura clásica, lo suficientemente alto como para ensoñar qué serían aquellas finas piernas, si en vez de modesta estatura, el tacón lo fuese de aguja. Tan clásico y tan moderno como para desear ser el pecho afortunado, que recibiera la ligereza de su agudo pisar.<br /> <br /> De soslayo mira, que el taconcito de aguja, acompaña con gracia a la horma de un zapato, acolchado en los flancos, rematando en un lacito, su redondeada punta.<br /> <br /> El improvisado Quijote, o quizá el sacrificado Sancho volvió voraz a su lectura, pues la intensidad de este soslayo, podría despertar a la princesa, su Dulcinea de ensueño.<br /> <br /> Ella, Aldonza probable , espabila su inesperada siesta y se levanta del banco, al tiempo que acabó el soslayo, y él perdía directo sus ojazos en el verde oliva de la gabardina, en las finas y largas piernas y en el taconcito conmovedor y el lazo.<br /> <br /> Él, Alonso soslayado, perdía a su Dulcinea y ella, la más que probable Aldonza, se perdía, no en el trigal de un campo, sino en el gentío de quién sabe, sino era Gran Vía.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-987536702687183102011-01-15T13:51:00.004+01:002011-01-15T14:24:43.124+01:00DiVersos<br>La punzante mirada,<br /> y su agudeza.<br /><br /><br /> ------------------<br /><br>El amor, un cartón donde reposar.<br /><br /><br /> ------------------<br /><br>Desahucio de la piedad,<br /> final de la esperanza.<br /><br /><br /> ------------------<br /><br>Desparramados de horizonte,<br /> descarnados,<br /> deliquios del presente.Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-60578031159041287592011-01-14T18:35:00.007+01:002011-01-15T00:41:31.004+01:00DiVersos<br>Los dedos, con las eses, se vuelven culebrillas bailando en la seda de la vida. <br /> O sinuosas que son, tanto como insinuantes.<br><br /><br /><br /> ------------<br /><br>La risa carcajeante de una ballena, o de hiena.<br><br /> <br /> ------------<br /><br>La fe de vida, ¿la dan aquí?<br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-45564186530457542822011-01-14T18:23:00.001+01:002011-01-14T18:34:34.635+01:00Haiku<br>Una ráfaga<br /> de viento caracolea<br /> en los pétalos.<br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-4212765692283731622011-01-14T15:53:00.003+01:002011-01-14T16:01:06.567+01:00DiVersos<br><br /><br>No toques sus versos<br /> son besos privados.<br /> <br /> No permito que metas los dedos<br /> en las palabras de mi poeta.<br /><br /> No toques sus versos<br /> son tiempos propios.<br /> Si los libros son públicos,<br /> sus poemas son míos. <br /><br /> No toques sus versos.<br /><br /> ¡Oh, el día en que de él te hablé!<br /> ¡Herrumbre sobre mis palabras!<br /> ¡Lluvia ácida en mis palabras!<br /> Quemadas debieron salir<br /> del cerco de mis dientes.<br /> Ulises, tu musa Atenea<br /> debió protegerme<br /> y sellar mi boca y callar para siempre.<br /><br /> No toques sus versos.<br /> No uses su nombre.<br /> No robes su memoria.<br /> No taches sus recuerdos.<br /> <br /> No toques sus versos,<br /> no toques sus versos.Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-8530512578683293292010-12-18T22:07:00.010+01:002010-12-18T22:29:56.939+01:00Narraciones ficticias 22<br>NO CRUCEN LAS VIDAS<br><br /><br /><br>Era por mayo. Aún no hacía calor, pero un alma tentada de extravío, debió ser tocada por algún rayo, de mayo o de sol.<br />Tocado por alguna ballesta, el conductor del convoy, extravió las vías y las horas; si las de él, también de los viajeros, que atónitos asistían a un agujero del día, o del tiempo.<br><br /><br>“Les habla el conductor” se oyó decir a una voz. El agujero decía que estaban en un avión, más los ojos veían cables y vías.<br><br /> <br>“Les habla el conductor, les tengo que decir que me he equivocado” y el asombro apareció en la cara de todos “me he equivocado de vía y no vamos a A.” <br /><br>Sonrisas sorprendidas miraban el reloj. <br />La voz se había callado y con el pasmo en el gesto, empezaron las preguntas ¿ Es esto verdad? O…Antes de terminar, la voz.<br /><br> “ Les habla el conductor. Vamos a entrar en M.A. y ahí ustedes cogen otro tren para A. No se preocupen, no se pierden. Ustedes vayan detrás de mi, que yo también voy”.<br><br /><br>Incrédulos, o tal vez descreídos, comenzaron las llamadas, la conversación se avivó.<br />El agujero se expandía junto con la voz. “Señores viajeros, les habla de nuevo el conductor. Les voy a pedir un favor. Que no me denuncien, porque me pondrán una sanción y estoy casado y tengo dos hijos”.<br><br /><br>Inaudito.<br /><br>Curtidos en la escucha de la plegaria limosnera, habían de consentir a la mayor.<br />Mayo entraba por las ventanas, no se veían trigos encañar, el vagón no se movía, habían pasado más de veinte minutos, y parecía que sí, que…<br><br /><br>“Les habla el conductor. Me acaban de comunicar que la sanción son tres días sin empleo y sueldo”<br> <br /><br>Habrían de consentir que llegarían tarde al trabajo, la cita tendría que retrasarse, pues ya no llego a, o tendré que pedir un justificante.<br />Es mayo y la avecica canta.<br><br /><br>“Soy el conductor de nuevo. Me dicen que la sanción es un mes sin empleo y sueldo. Un mes”<br><br /><br>Rendidos totalmente a la súplica. Un susurro ¡que le digan que sí!<br />Caía mayo en el entramado de vías, los lomos del barranco, campos de amapola.<br><br /><br>“Señores, les habla el conductor. Les llevo a A.”<br><br /><br>Los murmullos y los corrillos se calman.<br />La luz se inclina al mediodía y un silencio enamorado del agujero del tiempo o de mayo, preside la vuelta.<br />El albor ha pasado, la avecica se extravió.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-76171741712950669422010-11-13T20:32:00.008+01:002010-11-13T20:59:13.546+01:00DiVersos<br>El viejo castaño rinde pleitesía a la joven naturaleza.<br><br /><br />----------------------------------------------------------<br /><br>Puntillas y puertas, cine de mar.<br><br /><br />----------------------------------------------------------<br /><br>En el bar de las ocas, todas ellas parecían cisnes.<br><br /><br />----------------------------------------------------------<br /><br>Bajo el cuadrado de tu media, tiembla el brío de tu carne prieta.<br><br /><br />----------------------------------------------------------<br /><br>En moto iba coqueta señora de edad mediana. Iba luciendo, vespa del presente y morada mañanita de lana.<br><br /><br />-----------------------------------------------------------<br /><br>In media res, la vida es.<br><br /><br />-----------------------------------------------------------<br /><br>En la calle, el cayado sostiene la edad en la piedra.<br><br /><br />-----------------------------------------------------------<br /><br /><br>Tinieblas son, sin esperanza cuelan.<br><br /><br />-----------------------------------------------------------<br /><br /><br>Una boda: la clase media y obrera, juegan a las fiestas de palacio.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-36947877424465189382010-11-13T19:26:00.009+01:002010-11-15T08:39:51.002+01:00Narraciones ficticias 21<br>REOJO<br><br /><br>Por la aburrida nostalgia de sus ojos, se ha cruzado, ya cerca de la noche, un fulgor. El rojo de la camiseta escotada y el hombre, ojos golosos.<br />Un anodino hombre, de horas y horas de trabajo. No hay nadie que espere, ni cálida casa que cobige de las tormentas y los rayos.<br />Más bien, un hombre imbécil, que lleva la soledad de la ciudad en el rostro. Un hombre lelo, lleno de nostalgias imposibles. Un tonto de mirada seca que regó el fulgor, en el mismo instante en que lo apagó.<br /><br>Se daba cuenta. Hace tiempo que se daba cuenta de la inermidad, de la indiferencia mineral que le invadía. Cada hora un poco más, hasta llegar al segundo que todo lo transforma.<br />El día había sido largo y monótona su jornada, en ese trabajo soso, más bien estéril que tenía. Sobretodo soledad.<br />Detrás de aquél mostrador al que se acercaban muy pocas personas al día, las horas pasaban con la lentitud del aburrimiento, y en el pensamiento polvo. Sin ocurrencias, sin distracción de la abulia. Un minuto más y el espanto aburrido y monótono, habría terminado.<br /><br>Y seguía otro espanto de aburrimiento y soledad, en el trayecto de vuelta a casa. A casa, qué casa.<br /><br>¡Ah, el fulgor! ¿No había habido un fulgor? de camiseta roja, escotada, de abundante pechoprieto y un hambre de niño. Un fulgor, que no perdería el instante en el que ella se cruza, y muestra más motivos de ojos golosos, subiendo las escaleras, su cuerpo delicioso.<br /><br>Más bien un hombre seco, cubierto de indiferencia mineral. Un hombre sin rojo ni fulgor. Un segador de chispas.<br /><br>La La casa vacía, la casa en silencio, la casa limpia neutramente. Neutramente limpia de la presencia mineral del tiempo.<br /><br>Neutramente limpia y él, polvo.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-71356931337690907342010-10-22T14:18:00.004+02:002010-11-13T21:00:59.747+01:00DiVersos<br>Apostados en el skyline, los grajos cantan<br /> la melodía del presente.<br /><br />-------------------------------------------<br /><br>Unanimidad <em>císnica</em> de tu sonrisa.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-1107144308150523932010-10-15T20:21:00.007+02:002010-10-22T18:55:22.814+02:00El hombre de la cabeza cuadrada (2)<br><br /><br>Buenas tardes, señor Sapo.<br />Hoy ha sido un día de mucho calor.El sol cada vez tuesta más, calienta y calienta, sin atender a razones.<br />Hoy, con este calor, no tengo muchas ganas de hablar. Sí, no será el calor, será lo que ví. <br /><br>¿Qué tengo que hacer para ser como tú? Apacible y tranquilo en tu charca dorada.<br />No encuentro palabras, estoy aturdida, será el calor.<br />Voy a contarte lo que oí.<br /><br>Señor Sapo, oí que decían de odios y venganzas y que un pájaro picaba la cabeza de un hombre medioenterrado, en el campo. Un hombre culpable de su odio, o a lo mejor no era eso, y era el odio el culpable del hombre, allí medioenterrado, muriéndose de picotazos y sed.<br /><br>Las cuadrillas de las venganzas, oí que decían.<br />Señor Sapo ¿qué es la venganza?<br /><br>Hace calor y su charca resulta muy apetitosa. Tan clara y se le ve tan fresquito.<br /><br>Hubo juego de Florines. EL otro día. También estaban los muchachos o ¿cómo se dice? Los florines corren por las manos, que quedan vacías sin su presencia. Estaban fresquitas las piedras del porche. Y los vestidos de las niñas eran bonitos, de telita fina con florecitas pequeñas. Señor Sapo, el mío también. ¡Esa tela finita que deja que en ella se peguen calcomanías!<br />El florín corría, cayó en mi mano.<br />Le toca a él, adivinarlo.<br /><br>Señor Sapo ¿tengo que adivinar qué es la venganza?<br />Cuando escucho a las madres que hablan del semienterrado, me da miedo. Oía una furia de gentes enloquecidas, como bisontes de las películas del oeste, que tanto me gustan, en esa tele en blanco y negro que han puesto hace poco. Me da miedo eso, me recuerda al demonio, que tampoco sé lo que es, pero he visto dibujos y las madres lo dicen mucho. Las madres dicen ¡eres un demonio! Aunque a mi me lo dicen, y señor Sapo ¿qué es un demonio?<br /><br>Después de algún tiempo, el pájaro se iría de allí ¿no le parece, señor Sapo?. Y tal vez, vinieron otros pájaros, ya muchos.<br />Los padres cuchicheaban de esto y sólo les entendía: hay que callar, con el odio, hay que callar.<br /><br>Pues hoy es un día bien bonito, ahora que el calor se me ha quitado. Seguro que es el agua de su charca, que es tan cristalina que parece que la protege un carámbano y eso me quita el calor.<br />El florín seguía calentito en mi mano, mientras sentía la piedra fresca y el chico miraba a otra niña, que tenía un vestido de cuadros. Esa niña le gusta, por eso la mira. Piensa que ella tiene el florín guardado.<br /><br>Señor Sapo, creo que sí sé lo que es el odio.<br /><br>Los padres les dicen a las madres que no hablen de lo que no saben y ellas se ríen, porque dicen que ellos sí que son ignorantes, que en esa venganza estaban también las faldas. ¿También?<br />Señor Sapo, esas faldas ¿qué faldas son? ¿Son aquellas donde las niñas guardan sus manos entre las nalgas a la espera que el chico, las señale con su mirada?, ¿aunque florín no halla?<br />Había una falda colgada en una lía, con el aire, los pliegues restellaban y un hombre rubio y de vizca mirada, no le quitaba ojo a la falda. Y a la puerta. A la puerta entreabierta y a la falda plegándose. No le quitaba ojo pero parecía dormido, quieto como estaba, fijadas sus piernas, atornilladas al suelo. La falda, la puerta, la puerta y la falda. Una mujer con largos bucles y descalza, en el arco de la puerta, se quedó parada mirando al hombre. La falda plegó un restellante zarandeo, cuando sus miradas, olvidaron el tiempo.<br /><br>El sonido del viento en la lía y en la hojarasca. En el suelo, la falda levantaba el vuelo o despertaba el sueño.<br /><br>Señor Sapo, cuando ya era muy de noche, una mujer le dijo a otra, que los asuntos de falda están llenos de sangre y de odio. Y un hombre hosco y rudo les dijo, ¡callaros! que los muertos oyen y piden venganza.<br /><br>Señor Sapo, el chico no adivinó el florín entre las faldas.<br />Cayó la tarde y al levantarme mi vestido lucía calcomanías de plata, entre mis dedos el florín resbalaba, piedrecitas calientes de entre las manos y las nalgas.<br /><br>La venganza ¿qué será la venganza?<br /><br>¿Dónde ha ido, señor Sapo? Nunca avisa cuando se cansa.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-70977442215650368652010-10-15T15:55:00.001+02:002010-10-15T15:56:54.942+02:00DiVersos<br><br /><br>En la entraña de la nostalgia, revienta el tiempo.<br><br /> -------------------------------------------------------Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-25312609760475672232010-10-10T19:41:00.002+02:002010-10-10T19:46:34.592+02:00DiVersos<br><br /><br>Los días son así, enteros<br><br /><br>----------------------------<br><br /><br>Momentos, ocurrencias, chistes o melancolías<br><br /><br>----------------------------<br><br /><br>La luz y su silencio<br><br /><br>----------------------------<br><br /><br>Perdigones al viento como los besos al aire<br />o las palabras al agua<br><br /><br>----------------------------<br><br /><br>Perdigones o pensamientos<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-30841715670441154882010-07-23T12:56:00.006+02:002010-07-23T13:13:11.701+02:00DiVersos<br>Mundo en el muro.<br><br /> ----------------<br /><br>Cuajadas presencias, pueblan vacío.<br><br /> ----------------<br /><br>La Naturaleza toma posiciones. <br /> Su ignorancia la exime de su indiferencia.<br><br /> ----------------<br /><br>La belleza es el bálsamo ¿o es la verdad?<br /> La construcción de la belleza ¿o es inmanente?<br><br /><br>¿La mirada la crea? ¿o los ojos la ven?<br><br /><br>La verdad son fragmentos y la belleza es un orden ¿o es al revés?<br /> La mirada unifica ¿o pixela los ojos?<br><br /><br>La belleza pixelada de la verdad.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-39939800224964037782010-06-27T21:59:00.011+02:002010-07-02T09:52:28.904+02:00El hombre de la cabeza cuadrada (1)<br><br /><br>Un calor sofocante, un calor sofocante. Cuándo llego, cuándo llego. Ahora viene la curva, sí la curva, ahora viene. Cuándo llego, ahora la curva. Qué venía luego. La curva no termina, cuándo termina esta curva, qué calor sofocante. La curva y el calor. Y el polvo, qué polvo. Es por el calor, este calor hace que haya polvo y la curva levanta polvo. Qué tonterías digo, cómo va a levantar polvo el calor, será el camino. No, el calor hace que en el camino el polvo se levante, sí es así. No llego nunca, me estoy cansando y no llego nunca, no sé qué pensar, sino llego nunca no se qué pensar. Cuando la curva termine vendrá el terraplén, que bajándole, casi habré llegado. No termina la curva, a lo mejor me he equivocado de camino, que llena de polvo el calor. A ver, creo que me estoy liando, no, no, el calor no se llena de polvo y si me he equivocado, cuándo viene el terraplén. Si hay un terraplén, entonces sí que habrá más polvo. Qué calor sofocante y no avanzo, me he equivocado. No, no, el calor no me deja pensar, me entra miedo, a lo mejor es eso que tengo un poco de miedo. Tanto sol y sólo el polvo en este camino, con esta curva que no termina nunca. Sí tenía que haberme esperado, azota como latigazos a las bestias y a la cabeza le zumba y si la cabeza zumba y no funciona, entonces qué voy hacer. No funciona y por eso no veo la cuesta abajo, que luego ya queda muy poco y llego. Estoy tardando tanto que cuando llegue ya no está, se habrá ido, sí con este calor sofocante, seguro que no me ha esperado. Tampoco sé si me conoce, qué cosas digo, pues claro que me conoce, cómo no me va a conocer. El primer día se quedó mirando, mirando, con los ojos muy abiertos. Se me llena la boca de polvo, tengo calor y la boca abierta se llena de polvo, polvo fino que se queda pegado a la lengua, me raspa, entonces tengo sed. El sol en la cabeza no me deja sentir sed, esta agüilla es salada. No tengo sed, esta agüilla salada no me quita la sed, así que no tengo sed. A lo mejor estoy más cerca, voy cuesta abajo, el polvo ahora me llega al pelo, no veo bien, la agüilla salada se mete en la boca y el pelo también. Está salado. El polvo y el pelo están salados y no tengo sed, no me quita la sed. Sudo, por el pelo sudo y caen chorretes por los carrillos, y con el pelo se mete en la boca, los chorretes y el pelo, sudo mucho y no veo bien, entonces sí pierdo la cabeza, no veo, no veo y el suelo está muy cerca, será que ya no veo y el polvo ha llenado la cabeza de sol, con el agüilla que se pega el pelo en la coronilla, pegoteado de polvo y el sol que suda en mi cuerpo, que cerca veo el suelo, a lo mejor es que ya no me muevo, no ando ni nada y estoy tumbada encima del polvo del sol, no del polvo, del camino, ya no hay polvo, entonces es que me he caído, ya no me muevo, no hay más que sol, no hay polvo, y el agüilla no me entra en la boca, se cae por el carrillo, el chorrete resbala y me entra en la oreja, sí, me he caído, no siento que me haya caído, no se cuándo, pero si no hay polvo es que no ando. El polvo no era del sol, era del camino y si no hay polvo no hay camino, no, no es eso, la cabeza se desmenuza con el sol, sí no sé si es el polvo. En la oreja oigo una agüilla, si no estuviera salada podría beber, ahora sí tengo sed, el pelo suda y no me quita la sed. No hay polvo, no veo, será el sol.<br><br /><br /><br>Hace fresco, creo que la cabeza se descompuso y se llenó de polvo y se llevó el camino. Hace fresco, sí el sol llenó de agüilla el polvo y ahora está fresco. El sol me tumbó y borró el camino, ahora ya le veo, sí que he bajado, sí. La curva hace mucho tiempo que fue, estoy abajo, cerca ya de donde estará esperándome. No me habrá esperado. El sol no azota como a las bestias, no zumba en la coronilla como muchas abejas juntas, está lejos. Antes, cuando me tumbó, estaba encima de la coronilla, ahora está lejos, a lo lejos, de color naranja, muy, muy naranja. Se ha ido el polvo y el agüilla también, a lo mejor se ha ido, como mi cabeza que se llenó de chorretes y no sé que ha pasado, pero ya estoy muy cerca, está fresquito en esta parte. El camino sigue cuesta arriba, no hay polvo aquí en lo hondo, el sol se ha ido lejos, el agüilla se ha empapado en el pelo, y la charca, donde veo que me espera, con sus ojos como platos y respirando fuerte con el pecho, me quita la sed, mientras le digo: Buenas tardes, señor Sapo.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6027705191335765670.post-49280455245024209942010-05-23T22:29:00.005+02:002010-05-28T11:11:23.365+02:00DiVersos<br>El mundo es un espectáculo innoble.<br><br /><br>......................................<br /><br>Los hombres tropezándose en caminos de paja o asfalto.<br><br /><br>......................................<br /><br>La celebración de la Fortuna de tiempo.<br><br /><br>.......................................<br /><br>Despierta con las hebras finas y sedosas que eran consuelo del anterior desierto.<br><br /><br>.......................................<br /><br>Los sueños no son compartidos.<br><br /><br>.......................................<br /><br>Moradas imaginadas, vacíos sueños.<br><br /><br>.......................................<br /><br>Tejido de memoria y palabra, alma.<br><br /><br>.......................................<br /><br>Acabose la cosecha y recógense las cañas quemadas por el frío.<br><br /><br>Careliahttp://www.blogger.com/profile/00299185005458800261noreply@blogger.com0